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Colombia: Mamos Arhuacos purifican la Sierra de la sangre derramada

"Los pájaros pueden cambiar de plumas, pero nunca su canto; nosotros nunca cambiamos ese mensaje que queremos dar, estamos tejiendo pensamiento para garantizar la vida del mundo y de la humanidad'", Mamos Arhuacos

SIEC. Actualidad Étnica, 29 agosto 2008.- "Nuestra espiritualidad nos dice que quizás es el mismo hombre el que se hace daño cuando hiere al otro hermano", con esta reflexión los indígenas arhuacos dan testimonio de cómo se les han vulnerado sus derechos, cómo el corazón del mundo -la Sierra Nevada de Santa Marta- está herido, cómo ellos sin rencores buscan sanar las heridas que les ha dejado la guerra y como purifican su territorio manchado de sangre a causa de un conflicto que "jamás se solucionará con las armas".

El asedio militar y las violaciones a las jóvenes arhuacas han puesto sobre alerta a esta etnia que no concibe la violencia, sino que clama por la paz e invita a los actores del conflicto para que pongan fin a esta absurda guerra.

Actualidad Étnica, conversó con Arukin Gumu y Kasokaku Busintana Mestre, líderes arhuacos, provenientes de la Sierra Nevada de Santa Marta, y representantes de la comunidad arhuaca de Seynimin, quienes expusieron los hechos que amenazan la seguridad y la pervivencia de su comunidad, del Pueblo Arhuaco y de la Sierra Nevada.

A ellos les fue encargada una misión por parte de sus Mamos (autoridades de su pueblo): transmitir un mensaje de denuncia al mundo, pero al mismo tiempo un mensaje de esperanza y perdón. Solicitan que no se manche más su territorio de sangre; "la Sierra es un Templo Sagrado y no se debe Profanar". También invitan a reflexionar desde la vida y desde la Sierra Nevada, corazón del mundo, para que no haya más violencia en Colombia.

En la Sierra se violan los Derechos Humanos

El pasado 4 de agosto la Confederación Indígena Tayrona, CIT, denunció agresiones contra Seyningumu Arroyo Alfaro de 21 años y Kaney Maku Torres Ramos de 14 años, ambos arhuacos, quienes resultaron heridos con arma de fuego. De este hecho la organización arhuaca responsabilizó al ejército (tropas del Batallón La Popa de Valledupar). Los líderes arhuacos corroboraron la versión.

Aseguraron que los indígenas heridos son arhuacos tradicionales de manta, viven en su territorio; "ellos fueron enviados por los mamos a llevar un trabajo a un sitio sagrado cuando recibieron disparos en su cuerpo. Ellos son de la comunidad de Seynimin, municipio de Valledupar.

"Luego de resultar heridos fueron trasladados a Valledupar donde fueron atendidos en la Clínica. A uno de ellos parece que le van a amputar el brazo. El otro recibió el disparo en una pierna, no pueden caminar y están a la espera del parte médico. Ahora permanecen en la Casa Indígena de Valledupar, pero siguen graves y en tratamiento médico".

El argumento de las autoridades arhuacas para responsabilizar al ejército de estos hechos, es que los militares siempre han permanecido en esta zona; "todo el tiempo han estado ahí, se han adueñado del territorio, son ellos quienes controlan, no son nuestras autoridades.

"Los militares limitan nuestra forma de gobierno basadas en nuestras propias costumbres, eso no lo respetan ellos, sino que han entrado, permanecen y controlan la zona. Al día siguiente, ellos continuaban ahí. Fueron ellos", indicaron los líderes arhuacos.

También manifiestan que les han reclamado a los militares y que ellos han dicho que fue una equivocación, pero que realmente el ejército no ha dado una respuesta oficial.

Una fuente militar de Valledupar indicó a Actualidad Étnica que la zona donde ocurrieron los hechos no es de jurisdicción del Batallón la Popa, sino del Batallón de Ingenieros. Actualidad Étnica, intento conocer la opinión de los militares, pero no hubo ninguna respuesta.

Ante estos hechos la Procuraduría Delegada para Derechos Humanos y Asuntos Étnicos, le dijo a Actualidad Étnica que hará un llamado a la Fuerza Pública para que Proteja a las comunidades, y que iniciará el trámite correspondiente ante las autoridades competentes para que adelanten la investigación y de hallar responsables sean sancionados de acuerdo a la ley.

No obstante, los hechos que ocurrieron el pasado 4 de agosto y las recientes violaciones de sus mujeres no han sido los únicos casos de violación a los Derechos Humanos de los arhuacos.

La historia de la etnia arhuaca ha sido de permanentes circunstancias adversas: la invasión a sus tierras y la aculturación por parte de los conquistadores y la religión; asesinatos de sus líderes y sus comuneros; desplazamiento de sus comunidades; profanación de sus sitios sagrados; despojo de sus tierras e intromisión en sus ritos y en su cultura; amenazas y señalamientos macabros que, como ellos dicen han mancillado el honor de su pueblo y han manchado su territorio de sangre.

Los mamos no entienden por qué le han hecho todo esto a su pueblo. Precisamente porque nadie les ha dado respuesta, ellos y su comunidad, han decidido denunciar las constantes violaciones en su contra; porque no han sido escuchados, y porque "todo queda en la impunidad. Lo que nos preocupa es qué más va a pasar; hoy les disparan a dos de nuestro indígenas... mañana qué va a pasar, esa es la preocupación nuestra".

La preocupación aumenta, según ellos, porque estos casos se han llevado a muchas instancias nacionales e internacionales, pero la intimidación y agresiones en su contra continúan. "Los Mamos no entienden por qué en las constituciones y convenios se habla del respeto a nuestros derechos, si eso no se cumple".

La militarización afecta la cultura y la permanencia territorial de los arhuacos

Los representantes de la comunidad arhuaca donde sucedieron los hechos sostienen que la militarización les ha afectado profundamente sus sitios sagrados; obstaculizando la realización de sus pagamentos y sus ceremonias rituales.

Afirmaron que cada día aumenta más la militarización en territorios indígenas sin ser siquiera consultados. "Esta es una forma de atentar contra los indígenas; no se ha consultado con los indígenas si queremos o no la militarización, el mecanismo de la consulta previa es nulo, pese a las normas constitucionales y los convenios internacionales que la establecen".

Consideran que, de lo contrario, en la Sierra Nevada ha crecido la militarización, hay más bases, más de 5.000 hombres, en el pie de fuerza; "ahora con los megaproyectos, las represas y la proyección del Puerto hay más presencia militar para que los indígenas no podamos hacer nuestros pagamentos. Eso es atentar contra la diversidad, contra la forma de pensamiento que tanto se pregona en la constitución, y contra las libertades de pensamiento".

La violación de jóvenes arhuacas

Otro aspecto que preocupa al Pueblo Arhuaco y que sus autoridades repudian es la violación a sus jóvenes mujeres. "Recientemente -aseguran los representantes de Seynimin- dos de sus jóvenes mujeres fueron violadas". Esta situación preocupa sobremanera a los arhuacos, máxime si se tiene en cuenta, como ellos dicen, que los hechos ocurrieron en los sitios donde operaba el ejército y cerca de donde el gobierno piensa hacer el Embalse Multipropósito Besotes.

Los líderes indígenas, afirmaron que las violaciones a las jóvenes son frecuentes en la Sierra Nevada por parte de los militares y otros actores armados que operan en la zona; paramilitares y guerrilla. Estos hechos afectan su permanencia territorial y la paz de su región; Vulneran sus derechos colectivos, su integridad y su dignidad.

La limpieza espiritual

Las últimas esperanzas de la humanidad se extinguen cuando se carece de paz y de una directriz espiritual, eso dicen los mamos de la Sierra. Por eso los representantes arhuacos no conciben que "vengan y nos disparan, que nos hagan víctimas de algo que no tenemos nadad que ver".

Las últimas informaciones que se tenían de la Sierra Nevada daban cuenta que había una relativa calma y que los indígenas podrían refugiarse en la paz y en la armonía que ofrece esta tierra excepcional.

Hoy ven con angustia como se empiezan a desencadenar hechos violentos. "Los mamos y las autoridades tradicionales que están allá -le dijeron a Actualidad Étnica los voceros arhuacos- estaban haciendo un saneamiento al territorio, para limpiarlo de tantas violaciones y derramamiento de sangre que ha habido en la Sierra".

Aseguran que sus territorios los han utilizado como estrategia militar; internamente -los arhuacos- trabajamos buscando la armonía de nosotros con la naturaleza, el equilibrio de esos sitios sagrados que han sido manchados de sangre, de guerra y por eso se hace una limpieza espiritual; "los mamos con sus comunidades están sanando el territorio espiritualmente; sanando el medio ambiente, sanando el agua, de tanta contaminación: bolsas y basuras en los ríos que han dejado personas externas".

Afirmaron, que no es pertinente hablar de una relativa calma tal como lo han hecho creer el gobierno y los medios de comunicación masivos; "aún no se han ido los paramilitares, ni la guerrilla, de lo contrario han invadido nuestro territorio, algunos se han adueñado de sitios sagrados que eran nuestros".

Ahora, los arhuacos buscan que sus territorios les sean devueltos; "queremos que esto se arregle por medio del diálogo y la armonía". Hacen un llamado a los actores de la guerra a que se concienticen que los arhuacos no son y no hacen parte de ella; "nosotros hacemos parte de la paz, queremos construir la paz de Colombia; que sea un país de paz, de armonía en medio de las muchas diferencias".

La historia no desmiente, porque no ha sido muy distinta

La memoria arhuaca no olvida a quienes han muerto por preservar su cultura, que es lo que realmente cuenta para los indígenas; las cosas que se sientan y se viven: "un indígena no se reconoce por lo que habla o lo que demuestre, sino por lo que piensa, lo que siente y por lo que es", afirmaron Kasokaku y Arukin.

Recuerdan como en los años 90 - 91 fueron asesinados tres mamos, líderes de la comunidad arhuaca, que viajaban a Bogotá. "Las investigaciones hallaron responsables al Estado, al ejército colombiano; así se conoció por organismos internacionales y el Estado fue condenado. Pero hay más; si hacemos un recuento, son muchos los líderes indígenas asesinados, no sólo arhuacos, sino kogui, wiwas y kankuamos, que todo el mundo conoce cuál ha sido la problemática. A eso se le suma esto; más las constantes violaciones: accesos carnales abusivos a nuestras mujeres y niñas".

Han vulnerado el corazón del mundo

Los líderes arhuacos explicaron que son muchas formas de atentar contra los pueblos indígenas de la Sierra, sobre todo al profanar la Línea Negra, sitios sagrados donde ellos realizan sus pagamentos y sus rituales ceremoniales.

Sostienen que hoy la Línea Negra se ve amenazada por los megaproyectos que proyecta el gobierno; "los mamos dicen que como no ha habido un saneamiento del territorio -manchado de sangre-, los sitios sagrados se han vulnerado con los megaproyectos; por eso es que está la guerra.

"Para nosotros la Sierra es el corazón del mundo, es un templo sagrado, pero no hay un conocimiento claro de esto; las multinacionales y el gobierno son analfabetas espirituales, no entienden que los indígenas no estamos en aras de comercio y que no vemos todo como un negocio. El territorio que reclamamos es para pervivir infinitamente, para que permanezca nuestra cultura, y para que se mantenga el equilibrio del mundo: la Sierra Nevada".

Sostienen que son muchos atentados contra los arhuacos; "el pensamiento indígena ha sido vulnerado de muchas maneras no solamente física, sino espiritual y culturalmente, esto tiene que ver con los derechos culturales y espirituales de nuestro pueblo".

Los representantes arhuacos consideran que los intereses que defiende la guerra arrastra a que los colombianos se maten entre hermanos; e incita a que otros personas entren a la Sierra, les invadan su tierra y les perturben sus ceremonias, sus ritos, sus formas de vida que se caracterizan por respetar todas las cosas; la naturaleza y el universo.

La ley Sé, instaurada por el Padre Serankua y la Madre Seynekun

Los líderes arhuacos hablaron con el corazón, con el espíritu guiador de la Naturaleza y del Cosmos, y con la anuencia y bendición de sus mamos, quienes les confiaron la misión de trasmitir su mensaje al mundo.

Los dos explicaron que el conflicto que se desarrolla en la Sierra es orquestado por gente de la región; "gente de acá (Cesar) con otros intereses: políticos, económicos... nosotros somos víctimas, estamos entre el fuego cruzado. Esta es una muestra más que la Constitución no se cumple.

"No sólo se viola la Ley indígena, la Ley de origen, el derecho mayor, los ecos antiguos del universo, de la tierra (Ley Sé), sino que también se vulnera lo que se ha positivizado: la norma escrita; entonces ¿a qué jugamos?

"No respetan ni la norma espiritual, ni la ley de origen, la ley Sé; la norma que dejo el Padre Serankua (Creador) y la Madre Seynekun (Madre Tierra), tampoco respetan la misma norma constitucional, ni los convenios y tratados internacionales. ¿Para dónde vamos?"

Esa es una explicación de la cual los mamos esperan respuesta; "queremos que nos expliquen para dónde vamos, cómo vamos a tejer el pensamiento entre todos" No conciben que mientras ellos dan una puntada de buena fe: de paz, de equilibrio, de respeto, de armonía, el gobierno y los militares dan la suya con fusil". En este sentido los arhuacos consideran que se atenta contara sus derechos colectivos.

El mensaje de los Mamos

Luego de muchas reflexiones las Autoridades arhuacas de la Sierra, los Mamos, decidieron enviar un mensaje al resto de sus hermanos colombianos y al mundo para que con firme convicción rechacen la guerra, y a quienes hacen la guerra les dicen que el camino de las armas es el más equivocado de todos, no lleva sino a la desgracia y sólo deja pesares y rencores.

Para esta ocasión Kasokaku y Arukin fueron los encargados de transmitir este mensaje de paz a la humanidad, una humanidad que declina y al mismo tiempo anhela la vida y se aferra a la esperanza como único bastión de subsistencia y dignidad.

El mensaje de los Mamos es un llamado por la paz, pero están seguros que con la guerra no la vamos a lograr. Advierten que hoy la Sierra, y sobre todo el agua corren peligro y que de no tomarse conciencia ahora, quizá mañana sea demasiado tarde; "hasta dónde vamos a llegar, quién se preocupa por el agua -que es la vida realmente-, quién se preocupa por el aire...

"Nosotros estamos para eso, para pagarle al agua, para pagarle espiritualmente al aire que respiramos, al viento, a la lluvia, a todo. No queremos imponer un pensamiento, sólo queremos que se respete el nuestro. Aquí estamos y seguimos resistiendo. Queremos que haya armonía; no queremos rencores, tampoco, a pesar de lo que nos han hecho históricamente".

Los mamos invitan a tejer la vida, a pensar en cómo cuidar la vida, la tierra, el mundo el universo. "Es como un favor que estamos pidiendo, sin rencores, sin odios; no somos resentidos, de ninguna manera, nuestra espiritualidad nos dice que quizás es el mismo hombre el que se hace daño cuando hiere al otro hermano y le hace daño. No le está haciendo daño al otro, sino él mismo es quien se hiere.

"Invitamos a una reflexión profundo, desde lo profundo del espíritu, del alma; no nos sigamos matando, no derramemos más sangre, eso no sólo enferma la sociedad, sino al planeta. Pensamos que la Sierra, por eso es la montaña más elevada cercana al mundo, es el resumen del mundo, porque nos dejaron a nosotros para cuidar, pero vienen los hermanos de abajo y la reducen; nos llevaron y nos dejaron esos conflictos allá, sin embargo nosotros queremos seguir tejiendo la vida".

Los mamos están de acuerdo que uno debe morir, pero de muerte natural o por enfermedad, pero obedeciendo al cauce natural; "cuando se atenta contra cualquier ser humano, cualquier hermano no se le permite un proceso de vida que es vivir la vida colectiva, organizarse en la comunidad, aprender y compartir los legados de la ley de origen. El pacto que hemos hecho de construir un país multicultural, diverso, ojala se cumpla, por favor tejámoslo, que no sea una retórica, sino una realidad.

"Queremos, los indígenas, que haya una reflexión, que la gente tenga otra mentalidad y sabemos que lo pueden hacer, por eso estudian y para eso se preparan. Los mamos también mandan ese mensaje ¡tanto postgrado, tanto trabajo desde las oficinas ojala se acuerden de pensar en la vida!"

El mensaje de los mamos concluye afirmando que los arhuacos no han cambiado su esencia, ni su canto (mensaje de esperanza, de vida, de paz, de armonía...) "Los pájaros aunque cambian de plumas nunca cambian su canto, eso es lo que hace uno nunca cambia el canto. Nuevamente queremos pedir que ya dejemos de matarnos entre colombianos, entre hermanos.

"¡Para qué más guerra!, no estamos llegando a ningún lado, ya no más guerra, no queremos violencia, queremos paz. No atentemos contra la naturaleza; nosotros estamos para morirnos, pero cunado la naturaleza diga y sea el momento indicado, cuando le quitamos la vida a alguien le estamos quitando la vida a la naturaleza".

"Los arhuacos somos gente de paz, pero hoy no estamos seguros"

Como habitantes ancestrales de esta región colombiana, los arhuacos, no han querido y no conciben que el discurso de la diferencia sea un discurso beligerante, sino un discurso de armonía, donde entre todos se pueda Tejer la ruta del perdón, del reconocimiento.

Kasokaku y Arukin enfatizaron que los arhuacos no son belicosos, "nos hemos distinguido es porque nuestra filosofía, es una filosofía de la vida, de entender que todo tiene una razón de ser; un arroyo, una piedra tienen vida y cumplen una función dentro del universo, y sí respetamos una piedra es porque tiene vida, tiene energía; si respetamos estas cosas respetamos mucho más al ser humano".

No obstante, hoy, consideran que a pesar de ese pensamiento de vida y valoración de las cosas que existen su seguridad es amenazada por los tejemanejes del conflicto. Un conflicto que por más que quiera el gobierno no se podrá resolver por la vía armada, según los líderes arhuacos.

Objetaron que la Política de Seguridad Democrática empleada por el actual gobierno -con el supuesto de alcanzar la paz- haya traído paz y ni siquiera seguridad a los colombianos, por lo menos los arhuacos se siente inseguros. "Vemos que se hace mucho énfasis en toda la política de seguridad democrática, pero nosotros no estamos seguros; la seguridad para nosotros es el territorio, los sitios sagrados, nuestra tradición, esa es nuestra seguridad.

"No estamos seguros. De cuál seguridad se está hablando; en la Sierra no hay seguridad porque no la garantiza el Estado, es el primero en violarla con las fuerzas militares. Esto se debe conocer para que el gobierno deje de pintar y mostrar pajaritos en el aire; esto que pasó en la Sierra pasa en muchas partes; en el Chocó y en muchos pueblos indígenas", expresaron a nombre de sus mamos.

"No queremos que manchen nuestra Madre Tierra con sangre"

Los líderes arhuacos sostienen que el asedio en su contra no es sólo por parte del gobierno, sino de los paramilitares y la guerrilla. Los arhuacos, al igual que muchos colombianos se cansaron de esta guerra inadmisible de la cual no hacen parte, pero que quieren involúcralos. "No queremos armas en nuestro territorio, no queremos que nos manchen Nuestra Madre Tierra de sangre, pero siempre, por ejemplo, la guerrilla cuando quiere utilizar como estrategia militar a la Sierra: nuestra tierra, ellos imponen sus políticas, dicen no, aquí los que mandamos somos nosotros'.

"Si uno, no está de acuerdo con ellos nos tildan como personas del Estado, del gobierno o de los paramilitares y si son los paramilitares, entonces nos señalan que somos de la guerrilla; si no le oponemos a los unos nos dicen que queremos defender a los otros y viceversa. Siempre hemos sido intimidados cuando queremos dar un mensaje de paz. Eso siempre pasa, sobre todo, con los líderes y con los voceros de la comunidad; siempre nos tildan con tal de invadir nuestra tierra", afirmaron Kasokaku y Arukin.

Explicaron que nunca han estado, y jamás estarán, de acuerdo con los secuestros, ni con la guerra, tampoco con los conflictos, porque ven la Sierra como un remanso de paz, como una Kankurwa; "la Sierra es una casa sagrada para ceremonias, para armonizarnos, para entendernos, para hablar un lenguaje de la vida, no de la muerte, somos pensadores de la vida. Pero Nuestra Kankurwa se ve interrumpida con todo lo que sucede por eso debemos entender que la vida nuestra se compone es de una vida social, espiritual, de mantener la cultura".

El conflicto sólo cambio de táctica

Los arhuacos sienten que hay un bombardeo (persecución) contra los pueblos indígenas y que el conflicto sólo cambio de táctica; "en la conquista cuando llegaron los primeros españoles los ataques fueron con perros, con caballos, con armas... Ahora se está repitiendo, pero de otra forma; con megaproyectos, quitándonos el territorio, entregando los ríos en concesiones y fuera de eso también hacen derramar de la misma cultura la sangre", dijo Kasokaku,

Sostuvo que "el conflicto nos tiene intranquilos; no podemos estar tranquilos en la Sierra: meditando, poporiando, tejiendo, cultivando la huerta tradicional, no estamos dedicados a eso -que si lo hacíamos antes-, sino pensando en qué nos van a hacer los hermanos menores, con qué más nos van a salir...

Por su parte, Arukin, agregó que "esa es la preocupación de los mamos, después de tantas cosas que han pasado con nosotros, ellos han dicho: los pájaros pueden cambiar de plumas, pero nunca su canto; nosotros nunca cambiamos ese mensaje que queremos dar, estamos tejiendo pensamiento para garantizar la vida del mundo'. Los mamos quieren dar este mensaje que: para nosotros el territorio es la madre tierra y no queremos que le hagan daño a ella ni a nosotros; cuando explotan, cuando hacen excavaciones, guaqueos es como si nos tuvieran lastimando a nuestra madre".

Manifestaron que no pueden permitir que lo hagan, porque eso va contra su cultura; "la nieve, por ejemplo, es la cabeza de nosotros; pero ahora se han hecho muchos estudios, se quieren montar teleféricos, con el Plan de Desarrollo y el turismo también quieren violar los sitios sagrados, las lagunas. Son tantas cosas que los Mamos dicen: nos sentimos sacrificados, torturados espiritualmente", con qué más nos van a salir realmente; creemos que el fin de los hermanos menores es terminar con nosotros realmente. Estamos perdiendo mucho de nuestra cultura por eso".

¿Qué nos cobran?

La reflexión de los mamos en torno a los hechos que motivaron a los arhuacos a denunciar estos hechos ante el mundo deja muchas incógnitas. El mensaje de los mamos plantea; "qué nos están cobrando: ¿haber cuidado la naturaleza, el medio ambiente? Sí, pese a tanto ataque y tantas cosas todavía mantenemos una armonía con la naturaleza con el entorno, armonizamos entre nosotros.

"Tenemos problemas pero son problemas normales, un control social se hace, pero nuestro planteamiento es ¿qué tienen en contra de los indígenas, de los arhuacos? O sino que quiten eso del artículo séptimo de la constitución que se ufana de proteger la diversidad étnica y cultural de la nación o que quiten el articulo que dice que los pueblos indígenas tienen una Jurisdicción especial".

Los dos líderes arhuacos cuestionan las actividades que realiza el gobierno para coordinar con los indígenas, pero para nada si no se cumplen los acuerdos. Kasokaku recuerda que "hace poco estábamos ahí, hablando de coordinar; hablábamos de que la Jurisdicción especial indígena no es sólo cómo se sanciona un indígena, cuando se roba un gallo, sino mucho más... la jurisdicción tiene que ver con que también los entes mayoritarios del gobierno y la sociedad entiendan que los indígenas tienen una manera propia de vernos, una cosmovisión milenarias fundada en la ley de origen y el derecho mayor".

Advierte que cuando dicen lo que piensan cumplen una misión de ser guardianes de la naturaleza, del cosmos y de la Sierra Nevada; misión encomendada por el Padre Serankua y la Madre Seynekun.

El llamado a los colombianos y al mundo

Conocedores de las bondades de la naturaleza y de la Sierra Nevada los mamos arhuacos hacen un llamado a la comunidad en general, a Colombia que es un país diverso, multicultural, pluralista y hasta multiespiritual. En este sentido esperan que la gente se solidarice con lo que está pasando con la temática indígena. Advierten que los indígenas no sólo son para adornar las oficinas con fotos y para que les tengan en los edificios; "no somos museos muertos, somos culturas vivas", expresaron los representantes arhuacos

Enfatizan que el llamado es a que la gente conozca que: "la Sierra no es sólo el Parque Tayrona o Ciudad Perdida; en la Sierra tenemos una cultura de respeto y armonía, una cosmovisión muy bonita que los hermanos colombianos deban conocer y ayudarnos a que el gobierno, las multinacionales y la comunidad internacional entiendan que la Sierra también necesita ser defendida como patrimonio del Mundo y de la humanidad.

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Fuente: Actualidad Étnica

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Comentarios

Agredezco a mis hermanos de la sierra nevada el cuidado de la madre seinekum, por cumplir con la orden de nuestro padre serankua que es el mismo creador del universo, sitado por las religiones y culturas con diferentes nombres (jehova, Ala,Budha, krisna Etc)en lengua arhuaka es nuestro padre serankua, del cual he recibido mucha ayuda, al igual que nuestro padre zeukukui.
Ruego a los mamos que sigan con el cuidado encomendado aunque nos, los hermanitos menores nos hayamos olvidado de nuestra madre y nuestro padre entrando en un olvido total de sus leyes y de quienes las representan en forma sabia. Hoy, los que aun nos acercamos a la sierra para escuchar la voz de nuestra madre seinekum y de nuestro padre serankua como los hijos prodigo despues de haber alejado de ella y causarle tanto daño con nuestra conducta,llegamos en busca de su perdon, para recibir la sabiduria ancestral perdida. Veneravles mamos que la luz de serankua y nuesro señor arwaviko que es el mismo kristo quien nacio en un lugar de la sierra nevada conocido como el jordan les acompañe por siempre.

Mi sueño es visitar la Sierra Nevada y conocer de cerca la cultura Arhuaca y compartir. Soy una simple ciudadana, mayor de edad, con ese sueñito.
Ojálá alquien me ayude a acceder a ésto.
Lo más cercano que he estado es en Santa Marta y de allà mirar la Sierra.
Si leyendo se siente algo diferente, cómo será estar allá....
Gracias por su atención

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