
En un año más del natalicio de José María Arguedas (Andahuaylas, 18 de enero de 1911-Lima, 2 de diciembre de 1969), compartimos un escrito del abogado Yuri Tornero Cruzatt, quien testimonia que su abuelo Bartolomé Tornero Revatta conoció al escritor peruano cuando cursaban estudios secundarios en Ica, en 1927. Es una época importante para Arguedas respecto de su acercamiento a la cultura de la costa peruana.
Arguedas en mi familia: amistades de la secundaria en Ica
Por Yuri Tornero Cruzatt*
Entonces, ¿qué pasó? Que éramos en el colegio San Luis de Ica, éramos solamente cinco serranos: de Lucanas, de la provincia de Castrovirreyna, yo no me acuerdo qué otro fue.
El secretario del colegio San Juan Luis Gonzaga de Ica, el señor, no me acuerdo, pero tenía un apellido ilustre, el señor Bolívar, y también tenía una presencia muy despótica porque entonces, el Perú, estaba muy dividido. Los serranos éramos considerados gente un poco bárbara, no éramos, en el buen sentido de la palabra, no en el sentido en que ellos lo pensaban (1).
José María Arguedas
18 de enero, 2021.- José María Arguedas, para los peruanos en general, es un personaje que transcendió por su prosa, y por dicho motivo se le reconoce. Fueron los míos quienes tuvieron alguna proximidad personal con él y llegaron a compartir estas experiencias muy personales. ¿Quién recuerda su voz, su tono u otras características? ¿Cómo hablaba Arguedas? En los escritos del autor hay eventos que marcan su obra en conjunto: en Arguedas fue su paso por Ica y, a pesar de que no fueron muchos años, fue lo necesario y en un momento muy especial de su vida.
También conocemos a Arguedas como un personaje dentro de la literatura y de la historia peruana, o de la lectura de algunas de sus obras en el colegio, o por medio de un estudio antropológico de la academia; pocos son aquellos que guardan una vivencia directa, en mi caso, familiar y enraizada a la misma experiencia personal, la cual paso a comentar.
Bartolomé Tornero Revatta, campesino huancavelicano, de Castrovirreyna, siendo muy joven, decide dejar su tierra ubicada en la serranía de los Andes y se adentra en la costa, en la ciudad de Ica para continuar sus estudios de secundaria. En este contexto, él coincide y comparte experiencias, diversas vivencias, pensión y convivencia durante el periodo de estudios del segundo año de secundaria en el colegio San Luis Gonzaga, época documentada por los biógrafos arguedianos, la cual fue un momento muy especial para la vida y la obra de nuestro escritor.
En este contexto de pandemia, aproveché la revisión del archivo familiar para digitalizar la libreta de notas donde se evidencia que Bartolomé estudió el segundo año de secundaria en el San Luis Gonzaga de Ica, en 1927. Asimismo, otras cartas donde se evidencia su empeño por la defensa de las comunidades y su compromiso –como buen ciudadano y en su búsqueda de una sociedad más igualitaria– con el campesino. También tuvo compromiso con la calidad docente y con las reivindicaciones nacionales, entre otros. Esas convicciones ya las compartía con Arguedas desde sus estudios, su amistad fue conjunta desde pareceres sobre los paisajes andinos u opiniones sobre la discriminación reinante en el colegio, o propuestas de solución a nivel político.
Libreta de notas de Bartolomé Tornero Revatta.
Esta amistad trasciende tanto que cuando va a Lima para estudiar secundaria, se entrevista con Arguedas y este lo apoya para su ingreso al Melitón Carvajal. Arguedas sabía las dificultades de todo provinciano de ir a la capital. Arguedas tenía una voz pausada, pensaba cada palabra que decía, le entregué una foto de parte de Bartolomé, él me entregó un libro, luego me indicó: Cuando digan Arguedas, debes decir presente, y así sucedió, me dice mi padre.
El año 1927 fue muy importante en la obra de Arguedas, significó su primer acercamiento a la cultura de la costa peruana, ahí es donde llega a ver cómo el racismo contra los serranos era muy marcado, y de cómo él tuvo que enfrentarlo. Su periodo en Ica es muy corto, ya que luego sigue itinerario a estudiar en otros lugares. Lo mismo sucedió con mi abuelo Bartolomé. En Ica, se hospedaron juntos en la casa de la familia Pérez. Se afirma que se habría enamorado por primera vez de la iqueña Pompeya Miranda Falconí.
En el San Luis Gonzaga confluían estudiantes de diversos orígenes: de las provincias sureñas de Ayacucho, Huancavelica y Apurímac. En su obra, de manera expresa, el cuento “Orovilca”, publicado en 1954, realiza una descripción del patio del colegio, de la Huacachina, de la plaza, entre otros lugares; así como de algunas experiencias que bajo forma literaria nos presenta Arguedas. Un fragmento de dicha obra es el siguiente:
Cierta tarde, sobre uno de los grandes ficus que dan sombra al claustro del Colegio, cantó un chaucato. Su voz transmitía el olor, la imagen del ingente valle. Los internos jugaban o charlaban. Salcedo se acercó, sorprendido, junto a una columna. Gorjeó nuevamente el pájaro; el cielo dorado recibió la música y se hizo transparente, bañado por el débil canto. Varios alumnos corrieron en el patio, persiguiéndose a gritos, y el chaucato se fue. Salcedo vino adonde yo estaba.
—He observado que escuchaba usted como yo, me dijo.
—Sí, se parece al zorzal. Nunca los había oído cantar en la ciudad. Salcedo me causaba turbación, más que a los otros compañeros del Colegio.
—Es muy extraño que haya venido a cantar aquí –dijo–. Quisiera hablarle de este pájaro; pero es usted muy callado, y es con quien deseo charlar siempre.
—Nadie le escucha como yo, Salcedo; aunque me faltan palabras para contestarle bien. Yo era alumno del primer año, un recién llegado de los Andes, y trataba de no llamar la atención hacia mí; porque entonces, en Ica como en las ciudades de la costa, se menospreciaba a la gente de la sierra aindiada y mucho más a los que venían desde pequeños pueblos.
—El chaucato es un espécimen real; me refiero a la realeza, no a las cosas.
Colegio San Luis Gonzaga. Fuente: confidenciasenaltavoz.blogspot.com
En el transcurso de los años, diversos biógrafos se han aproximado a la vida de Arguedas, entre ellos Mildred Merino de Zela, así como familiares; sin embargo, aún persisten algunas omisiones sobre el escritor peruano, como persona. Muchos teóricos se han adentrado a las disciplinas como etnografía, antropología, sociología, pretendiendo comprender el significado de Arguedas; sin embargo, no creo que el formalismo de la academia haya captado aún el mensaje de Arguedas a plenitud.
Este 18 de enero se cumple un año más de su natalicio, y considero que se debería revitalizar y recordar un poco más a detalle esas vivencias cuyas características aún persisten en la sociedad peruana y que muchas de ellas esperamos superarlas como sociedad.
Para terminar, transcribo algunas citas que tratan sobre la importancia del año 1927 para Arguedas:
En aquellos años, conforme dan cuenta algunas referencias escritas, la estancia del Amauta Arguedas en Ica, en los días libres y feriados a su condición de internado en el colegio, a solicitud de su padre, que entonces radicaba en Puquio, ha compartido la aquiescente hospitalidad de la familia Falconi, junto a su hermano Arístides, donde el estudiante adolescente Arguedas, se afirma que se habría enamorado por primera vez de la iqueña Pompeya Miranda Falconí.
Hablar del funcionamiento y positivo accionar educativo de este antiguo local, fundado por la colegiata jesuita al mando de aquel patriarcal y mítico sacerdote de apellido Orduña que data desde el año 1746, es hablar de los años de abolengo de plena autonomía económica y excelencia académica que atrae la presencia selecta de la juventud estudiosa de diferentes puntos del país, entre ellos las provincias sureñas de Ayacucho, Huancavelica y Apurímac (2).
Su primera experiencia con la costa peruana la vive en nuestra ciudad, entre la comarca que rodeaba la urbe, las dunas y muchos de los oasis que existían en Ica. Aquí también se enamora de Pompeya, una chiquilla que no correspondió a sus ruegos, muy por el contrario, lo despreció diciendo “no hago el amor con serranos”. Pienso que el ambiente o escenario del cuento “Orovilca” es muy real, sobre todo cuando describe las lagunas de ese tiempo. Nótese su esplendor, de las nombradas solo queda Huacachina. “La Victoria es la más pequeña; la rodean palmeras de altísimos penachos, y el agua es verde, espesa; natas casi fétidas flotan de un extremo a otro de la laguna. Es honda y está entre algodonales. Aparece singularmente, como un misterio de la tierra”. Las menciona a todas. “Huacachina”, de la que dice: Es extensa y la rodean residencias y hoteles, para después manifestar “Los largos caminos pavimentados, empedrados, me abruman. Y no me agrada ‘Huacachina’. La ostentación humana me irrita”, “Saraja”, “La Huega” y “Orovilca”.
Esta última es la referencia literaria –el cuento Orovilca– que nos permite encontrarnos con muchos de nuestros elementos eternos y mágicos como el Chaucato y el Huarango. Está narrado en primera persona (narrador testigo), comienza el cuento describiendo al Chaucato “es un genio benefactor y hermoso que encarna el agua fértil y fresca del subsuelo, o bien podría ser un príncipe o un genio antiguo del valle iqueño”.
En el cuento es una metáfora del mestizaje, ya que lo describe como un ave emparentada con los chihuillos y el guardacaballo de la costa, y con el zorzal serrano. En relación al Huarango de retorcidos tallos, ramas horizontales y hojas menudas que se tienden como sombrillas dice: “Los huarangos dejan pasar el sol, pero quitándole el fuego”. Todo lo que escribió, sirvió para mostrar al mundo el verdadero Perú, el de todas las sangres. Comprende: su narrativa, ensayos sobre folklore, etnología, antropología y cultura indigenista. Es tan completa su producción que, muchos intelectuales no supieron reconocer en su momento la verdadera dimensión de su obra. A pesar de haberse suicidado, logró dejar en nuestra Patria una huella que lo ha vuelto eterno (3).
Notas:
(1) Palabras de José María Arguedas en una conferencia de la Universidad Federico Villareal, en 1966. Recuperado de https://perubicentenario.pe/actualidad/arguedas-expone-sobre-los-prejuicios-entre-la-gente-de-la-sierra-y-de-la-costa-confesiones-de-1966-octava-parte/
(2) Recuperado de http://confidenciasenaltavoz.blogspot.com/2013/06/en-el-276-aniversario-del-colegio-san.html
(3) Recuperado de http://aldiaconmatices.blogspot.com/2011/01/el-tayta-jose-maria-arguedas-altamirano.html
---
* Yuri Tornero Cruzatt es abogado y doctor en Comparación Jurídica e Histórico Jurídica.
Te puede interesar:
Piden concluir Centro Cultural en el 110 aniv. del nacimiento de Arguedas → https://t.co/QgrK2yZE7C
Culminar el centro cultural #JoséMaríaArguedas. Arguedas es una de las principales demandas de los apurimeños que celebran el 18 de enero el 110 aniversario de su natalicio. pic.twitter.com/F2tFBwNj95
— Servindi (@Servindi) January 17, 2021
Añadir nuevo comentario