Servindi, 31 de agosto, 2009.- Un grupo de 12 pobladores indígenas de la etnia awá fue sepultado el sábado en el cementerio de Ricaurte, en el departamento de Nariño, donde grupos armados ilegales se disputan el control de corredores de droga.

El presidente de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), Luis Evelis Andrade, sostuvo que hay una guerra sucia, por un lado la guerrilla acusa a los indígenas de informantes y por el otro los paramilitares y los delincuentes los están matando por no formar parte del conflicto".

Los indígenas sepultados fueron asesinados el pasado miércoles por una decena de hombres uniformados, con capuchas y sin insignias, quienes dispararon con armas de corto alcance a toda persona que cruzaba por la comunidad.

Al momento del ataque, los pobladores indígenas se encontraban dentro de casas ubicadas en un resguardo indígena en Tumaco, también en el departamento de Nariño.