Servindi, 5 de marzo, 2009.- En Bolivia 2 de cada 10 personas se declaró indígena-originario, mientras el 68% se autodenominó mestizo, según la reciente "Encuesta Nacional sobre Valores y Actitudes frente a la Conflictividad en Bolivia" patrocinada por el Fondo para la Democracia de Naciones Unidas (UNDEF).
Dicha consulta pública, presentada oficialmente ayer en La Paz, fue aplicada a 3,288 personas en total, tanto en zonas urbanas como rurales.
Más allá del 20% que se declara indígena originario, un 44% de los encuestados dice "sentirse parte" de algún pueblo originario también independientemente de su condicion etnica.
Este dato evidencia claramente que los bolivianos "no ven contradictorio" ser mestizo y al mismo tiempo pertenecer a alguna cultura indígena, principalmente quechua y aymara, las más importantes en el país, según analizaron los promotores de la encuesta.
Esta identificación indígena boliviana también se evidenció durante el censo oficial del 2001, donde el 62% de la población se declaro perteneciente a alguna de las 33 etnias existentes en el pais.
De otro lado, el 76 por ciento ve más importante "ser boliviano" que indígena y el 82% lo valora por encima de la identidad regional.
Respecto a la unidad del país, el 89% opina que Bolivia no debe dividirse a pesar de sus diferencias y el 92% se declara orgulloso de su nacionalidad.
No obstante, las respuestas desvelan también una fuerte desconfianza entre los propios bolivianos: el 65% cree que lo que falla en el país es su gente y el 85% considera "que hay que tener cuidado con los otros".
Además, este estudio arroja la percepción de que en Bolivia hay "mucha discriminación", según el 59% de los encuestados y que "el color de la piel" es la principal causa de la misma, seguida de la condición económica.
Los "ricos" y los jóvenes serían los sectores sociales más racistas en opinión del 67% y el 53%, respectivamente, de las personas consultadas.
Finalmente, en este informe midió también el grado de confianza que los bolivianos tienen en sus instituciones, con el resultado de que la Iglesia Católica es la más valorada, seguida del resto de iglesias y de los medios de comunicación.