Servindi, 15 de septiembre, 2009.- El ministro de Culturas, Pablo Groux, anunció que le planteará a la Secretaría General de la Comunidad Andina (CAN) la creación de un mapa que identifique el patrimonio cultural "inmaterial" de cada nación de la región.
La propuesta será planteada en una reunión de los ministros de Cultura de los países miembros de la CAN (Bolivia, Perú, Colombia y Ecuador) que será convocada por Bolivia.
"La mejor opción es que nos sentemos las altas autoridades y a partir de aquello establezcamos una cartografía más completa que determine cuál es el patrimonio cultural que tenemos cada uno, cuál es aquel que compartimos y cómo debemos preservarlo", señaló Groux.
Este planteamiento fue hecho a raíz de la disputa surgida entre Bolivia y Perú por el origen de la danza de "La Diablada" y el dios andino "Ekeko".
En tanto, el Gobierno de Evo Morales anunció que postularía a la feria de "La Alasita" como una opción para conformar el patrimonio de la humanidad ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
La "Alasita", que significa "cómprame" en aimara, es una feria popular, cuya mayor manifestación se celebra en La Paz en el mes de enero, donde se venden todo tipo de productos en miniatura que simbolizan los sueños que se desean alcanzar a lo largo del año.
El protagonista de esa feria es el "Ekeko", dios andino de la abundancia representado en la figura de un hombre con bigote cargado de alimentos, dinero y distintos bienes.
En agosto, Bolivia y Perú protagonizaron otra disputa sobre expresiones culturales cuando paralelamente reivindicaron como parte de su patrimonio el traje de la danza de "La Diablada" debido a que la representante peruana en el Miss Universo, Karen Schwarz, presentó esa vestimenta como típica de su país.
Comentarios
Los actuales paises, que contienen pueblos diversos al interior de sus fronteras, son creaciones recientes (menos de 200 años)que no tienen comparacion con nuestras culturas originales, que son milenarias. Los aymaras, los quechuas, los chancas, los waris, los huancas, los shipibos, los awajun, por solo mencionar algunas de las nacionalidades que contiene el territorio peruano, comparten muy poco con los habitantes de Lima. En Bolivia sucede lo mismo. Ya es momento de reconocer que la Aymara es una nacion que viene de muy lejos, con un horizonte de existencia que sobrepasara nuestros actuales estados-Nacion. ¿Que impide este sencillo y elemental reconocimiento? Reconocer identidades culturales que trascienden fronteras hara volar por los aires la base misma de las "politicas de desarrollo" basadas en falsos intereses nacionales.
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